El seguro siempre ha penalizado la edad y la experiencia del conductor en sus seguros y parece que tiene razón. Un reciente estudio de Centro de Estudios Ponle Freno-AXA de Seguridad Vial muestra que la falta de experiencia al volante conlleva que los conductores más jóvenes tengan más probabilidades de sufrir un accidente de tráfico respecto a la media española. Los menores de 22 años tienen una frecuencia de accidentes del 29%, si no se supera la franja de los 25 años cuentan con un porcentaje del 25%, mientras que la media se sitúa en el 14,2%. Así, la probabilidad de sufrir accidentes de tráfico se duplica en los jóvenes.
Por otra parte, en el extremo opuesto se encuentran los conductores de más edad. Indica el texto que su mayor experiencia, el menor uso del vehículo y la utilización del coche en horarios de menor tráfico reducen su accidentalidad. De esta manera, los conductores entre los 66 y 70 años tienen una frecuencia de accidente un 17% inferior a la media. Este porcentaje se reducen más entre los que tienen entre 71 y 75 años con frecuencias de siniestralidad un 23% y un 26%, respectivamente, inferiores a la media.
El director general del centro de estudios, Josep Alfonso, considera que la «experiencia en la conducción es probablemente el factor más determinante a la hora de evitar un accidente de tráfico». Indica que la destreza al volante incide directamente en los accidentes que «logramos evitar, tanto si en ellos fuésemos culpables como inocentes».
Culpabilidad
El informe analiza 3 aspectos: siniestralidad total en función de la franja de edad, la culpabilidad de los siniestros por edades y el impacto aislado del factor edad en la probabilidad de provocar un accidente con daños materiales.
Más allá de estos datos el estudio indica que los conductores jóvenes, a pesar de su frecuencia mayor, tienen un porcentaje de culpabilidad inferior al 50%, siendo los conductores entre los 31 y los 40 años quienes tienen el índice de culpabilidad más bajo.
A partir de los 66 años la culpabilidad crece, aunque sólo unas décimas. Entre los 71 y los 75 años el porcentaje de responsabilidad empeora hasta casi el 54% y se incrementa hasta casi el 61% en los mayores de 75 años.
Concluye el informe que los conductores de más de 70 años son los que «menos accidentes tienen pero, por otro lado, cuando los tienen son responsables en la mayoría de ellos».